Consejos de especialistas para proteger la salud ocular durante los viajes y vacaciones

Según los especialistas en salud ocular, los ojos pueden sufrir daños durante los viajes en avión, coche, barco o tren, así como por la exposición a la radiación solar y otras actividades realizadas en verano. Durante esta temporada, es importante prestar una atención especial al cuidado de la vista, ya que los factores de riesgo habituales se ven potenciados. De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), más de tres millones de personas sufren daños oculares cada año debido a la radiación solar ultravioleta.

Recomendaciones para viajes en avión

La falta de humedad en la cabina de un avión puede provocar sequedad y enrojecimiento ocular. Además, en vuelos de largo recorrido, la interrupción del patrón de sueño puede generar irritación y cansancio en los ojos. Para aliviar estos síntomas, es recomendable hidratar los ojos con lágrimas artificiales, mantener una hidratación adecuada (especialmente si se usan lentes de contacto) y evitar el uso prolongado de pantallas móviles u ordenadores. También se aconseja elegir vuelos diurnos para no afectar el patrón de sueño habitual.

Consejos para viajes en coche

Es común experimentar cansancio e irritación ocular al viajar en coche, sobre todo en trayectos largos. Para aliviar el cansancio visual, es importante tomar descansos regulares y cerrar los ojos brevemente durante las paradas para favorecer la hidratación ocular natural.

Protección ocular en viajes en barco

Debido a la reflexión de la luz solar en el agua, se recomienda el uso de lentes polarizadas o espejadas para reducir los reflejos molestos. Aunque en ambientes acuáticos suele haber más humedad, también son más ventosos, por lo que es aconsejable el uso de gafas de sol y lágrimas artificiales para mantener el confort ocular.

Cuidado de los ojos en viajes en tren

Los viajes largos en tren, especialmente si hay calefacción o aire acondicionado, pueden provocar sequedad ocular. En estos casos, se recomienda el uso de lágrimas artificiales para aliviar la sequedad.

Precauciones en playas y piscinas

Para prevenir la irritación y el enrojecimiento ocular causado por el agua salada del mar o los productos químicos en piscinas, se aconseja el uso de gafas de natación y enjuagar los ojos con abundante agua limpia. Asimismo, se pueden aplicar gotas humectantes para limpiar los ojos después de salir del agua.

Importancia de las gafas de sol

La exposición excesiva a la luz solar directa puede ocasionar sequedad, irritaciones o quemaduras en la córnea, así como contribuir al desarrollo de cataratas y degeneración macular a largo plazo. Por ello, es fundamental utilizar gafas de sol de calidad con cristales homologados y filtro solar para proteger los ojos de la radiación ultravioleta. Se recomienda llevar gafas de repuesto y utilizar gafas con un cristal de color gris para conducir, y con filtro nivel 3 y lentes polarizadas para actividades al aire libre, en zonas de montaña o playa.