La fiscal general de Nueva York, Letitia James, ha presentado nuevos documentos legales en los que acusa al expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, de inflar su patrimonio neto durante varios años. Según el expediente judicial, Trump habría realizado entradas falsas en registros comerciales, falsificado estados financieros y cometido fraude de seguros.
En base a un análisis realizado por expertos en valoración y contabilidad, James estima que el patrimonio neto de Trump entre los años 2011 y 2021 fue inflado entre 1.900 y 3.600 millones de dólares anuales, dependiendo del año. Sin embargo, la fiscal considera que esta cifra aún es conservadora, ya que se basa en suposiciones utilizadas por los acusados en sus estados financieros.
La demanda de James implica a Trump y a varios de sus hijos, acusándolos de defraudar a bancos, compañías de seguros y otros entes para beneficiar a la Organización Trump. La fiscal está solicitando 250 millones de dólares por daños y perjuicios.
Además de este caso, Trump enfrenta otras causas judiciales por temas económicos, de seguridad nacional y políticos. Entre ellas, se encuentra una acusación de retener documentos relacionados con armamento nuclear en Estados Unidos y las capacidades nucleares de un país extranjero, incluyendo información confidencial de inteligencia de la Casa Blanca.
Estas acusaciones representan un nuevo revés para Trump y su imagen, mientras continúan las investigaciones sobre su gestión y acciones durante su mandato presidencial.
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