Experta en comportamiento canino destaca la importancia de saber dónde acariciar a un perro

Es crucial saber cómo y dónde acariciar a un perro, respetando sus zonas seguras.

Un gesto tan sencillo como acariciar a un perro puede ser clave para mantener una interacción segura y placentera, tanto para el animal como para la persona. Es por ello que expertos en comportamiento y adiestramiento animal hacen hincapié en la importancia de conocer en detalle cuáles son las zonas seguras para acariciar a un perro, así como también aquellas que es preferible evitar.

El enfoque adecuado para acariciar a un perro

De acuerdo con los especialistas, es fundamental comprender que, al igual que los seres humanos, los perros poseen zonas más sensibles que otras en su cuerpo. Eduarda Piamore, reconocida por su experiencia en psicología, educación y adiestramiento canino y felino, destaca la necesidad de aproximarse a los perros de manera respetuosa y consciente.

La parte superior de la cabeza, detrás de las orejas, el cuello y la base de la cola suelen ser áreas seguras y bien toleradas por la mayoría de los perros al ser acariciadas. Estos lugares, cuando son abordados con suavidad, suelen generar en los perros sensaciones de confort y tranquilidad, fortaleciendo así el vínculo entre el animal y su cuidador o la persona que realiza la interacción.

El veterinario inglés Clive Wynne, autor del libro Dog is Love, señala que el hecho de acariciar a un perro libera oxitocina tanto en el animal como en la persona, lo que contribuye a afianzar el lazo emocional entre ambos. Estudios han demostrado que esta interacción genera bienestar y calma en los perros, siempre y cuando se realice de manera apropiada.

Zonas a evitar al acariciar a un perro

Así como es crucial conocer las zonas seguras para acariciar a un perro, también es esencial identificar aquellas áreas que pueden generar incomodidad o incluso desencadenar reacciones no deseadas en el animal. En este sentido, el hocico, las patas y el vientre son áreas que suelen ser más sensibles para la gran mayoría de los perros.

El hocico, al ser una zona especialmente delicada, suele ser una de las áreas más sensibles en los perros. Por lo tanto, es importante evitar acercarse a esta zona, ya que puede generar incomodidad e incluso ser percibido como una amenaza por parte del animal. Del mismo modo, las patas son áreas que, al ser manipuladas, pueden desencadenar reacciones defensivas en muchos perros, dado su nivel de sensibilidad en esta zona. En cuanto al vientre, si bien algunos perros pueden disfrutar de las caricias en esta área, para otros puede representar una zona de vulnerabilidad y generar estrés al ser tocada.

Compartir noticia

Copyright ©2025 Todos los derechos reservados | TVOAI

Utilizamos cookies para mejorar tu experiencia de navegación, ofrecer anuncios o contenido personalizado y analizar nuestro tráfico. Al hacer clic en 'Aceptar', das tu consentimiento para nuestro uso de cookies.

Política de cookies.