La impactante confesión de Claudio Bermúdez, exintegrante de Timbiriche, sobre su paso por la banda

Uno de los grupos musicales más emblemáticos de México es, sin duda, Timbiriche. Este conjunto debutó en 1981 como una banda de niños que jugaba a hacer música, y es considerado uno de los más importantes de los años 80. Si bien integrantes como Benny Ibarra, Erik Rubín, Diego Schoening, Sasha Sokol, Alix Bauer, Mariana Garza y Paulina Rubio son recordados como los fundadores más queridos, otros artistas también formaron parte de esta icónica agrupación. Figuras como Thalía, Eduardo Capetillo, Biby Gaytán y Edith Márquez dejaron huella en la historia de Timbiriche. Sin embargo, detrás de la fama y el éxito, se esconden historias oscuras que afectaron la vida de algunos de sus integrantes, como es el caso de Claudio Bermúdez, quien reveló recientemente detalles inquietantes sobre su paso por la banda.

Los excesos y la vida dañada de Claudio Bermúdez

En 1989, Claudio Bermúdez se unió a Timbiriche, reemplazando a Eduardo Capetillo. Aunque este periodo fue recordado con cariño por el cantante, también provocó serios daños en su vida. En una entrevista reciente, Bermúdez confesó que, a pesar de considerarse un metalero en aquella época, su amor por la música lo llevó a presentarse a las audiciones para Timbiriche. A pesar de haber sido bien recibido por sus compañeros, Claudio fue consciente del desequilibrio que experimentó al entrar en un grupo ya consolidado, cuyos integrantes eran enormemente famosos y venerados por el público. Aunque tuvo la oportunidad de disfrutar de la fama y la fortuna, Bermúdez lamenta haber perdido a sus amigos de toda la vida y haber caído en situaciones que finalmente le causaron mucho daño.

Una vida marcada por los excesos

El cantante reconoce haber caído en la trampa de los excesos, lo que lo llevó a sentirse encadenado y atrapado en una especie de prisión mental llena de oscuridad. Aunque afirma no haber sido adicto a las drogas, reconoce que probó diversas sustancias en repetidas ocasiones, y que su mayor adicción fue el sexo. Estos excesos, que en un principio le resultaron divertidos, terminaron cobrando un alto precio en su vida.

El abrupto final de su participación en Timbiriche

A pesar de los momentos de gloria que vivió con Timbiriche, Claudio Bermúdez asegura que su salida del grupo fue repentina y poco clara. Nunca llegó a firmar un contrato y, un día, simplemente se enteró de que ya no formaba parte de la banda. Durante un mes y medio, intentó comunicarse con la oficina de Timbiriche para obtener una explicación, sin obtener respuesta alguna.

El oscuro pacto para pertenecer a Timbiriche

Bermúdez confesó que su ingreso a Timbiriche estuvo marcado por un oscuro episodio: un supuesto ritual que tuvo que llevar a cabo para formar parte de la agrupación. Durante al menos ocho meses, Claudio asistió a audiciones en Televisa, hasta que decidió recurrir a la ayuda de una persona que prometía agilizar el proceso. Este individuo le proporcionó una receta escrita en un papel que debía repetir siete veces al día, además de someterlo a un extraño ritual en un círculo negro. Posteriormente, Bermúdez se dio cuenta de que la persona que lo asistía estaba involucrada en prácticas satánicas, lo cual lo llevó a alejarse de esta situación de inmediato.

El renacer de Claudio Bermúdez

A pesar de los oscuros episodios que marcaron su paso por Timbiriche, Claudio Bermúdez ha encontrado un nuevo camino en la vida. Actualmente, se dedica a apoyar a nuevas figuras musicales y ha dejado atrás la exposición mediática. Además, ha dado un giro radical en su vida al convertirse en líder cristiano y emprender proyectos educativos.