Entrenadora asistente de Canadá se retira de liderar equipo olímpico tras escándalo con dron

El Comité Olímpico Canadiense sanciona a implicados por espionaje con dron en entrenamientos de fútbol femenino. Entrenadora deja cargo. Medidas éticas y disculpas.

El Comité Olímpico Canadiense ha tomado la decisión de sancionar a un analista sin acreditación y a la entrenadora asistente del equipo de fútbol femenino, luego de que se descubriera que utilizaron un dron para espiar los entrenamientos de la selección de Nueva Zelanda. Esta acción va en contra de los principios de juego limpio y respeto mutuo que rigen en el ámbito deportivo.

Decisión de la entrenadora asistente

Como consecuencia de estas acciones, la entrenadora asistente, Jasmine Mander, ha sido apartada del equipo, ya que fue la receptora del informe enviado por el analista no acreditado, Joseph Lombardi. Por su parte, la entrenadora principal, Bev Priestman, ha tomado la decisión de no liderar al equipo en su primer partido olímpico, como un gesto de preservación de la deportividad. Esta determinación demuestra el compromiso con los valores éticos y el fair play por parte del cuerpo técnico canadiense.

Diligencia del Comité Olímpico Canadiense

Tras llevar a cabo una exhaustiva revisión del incidente con drones ocurrido el 22 de julio en Saint-Étienne, y al tomar conocimiento de un segundo incidente ocurrido el 19 de julio en un entrenamiento de la selección de Nueva Zelanda, el Comité Olímpico Canadiense ha aplicado las sanciones correspondientes. En primer lugar, el analista no acreditado, Joseph Lombardi, y la entrenadora asistente, Jasmine Mander, han sido apartados del equipo y enviados de vuelta a su país de manera inmediata. Asimismo, se ha informado que el personal de Canadá, actual campeona olímpica, deberá someterse a una formación ética obligatoria, como parte de las medidas para reafirmar el compromiso con los valores deportivos y la transparencia.

Declaraciones oficiales

El Comité Olímpico Canadiense ha manifestado estar en comunicación con el Comité Olímpico Internacional (COI) y con la Federación Internacional de Fútbol Asociación (FIFA) para informar sobre lo sucedido y las medidas adoptadas. Asimismo, ha asegurado que el equipo de fútbol femenino de Canadá ha mantenido una actitud de transparencia y cooperación a lo largo de todo el proceso de investigación. El comunicado oficial del COC incluye la siguiente declaración: "El COC seguirá examinando este asunto y podrá tomar otras medidas si fuera necesario". Estas palabras reflejan el compromiso de la organización para garantizar la integridad y el cumplimiento de las normativas establecidas en el ámbito deportivo.

Disculpas y responsabilidad ante el espionaje

En un acto de responsabilidad y reconocimiento de los hechos, la seleccionadora Bev Priestman ha pedido disculpas tanto a las jugadoras y al personal de la selección de Nueva Zelanda como a las futbolistas de Canadá. En sus palabras, manifestó: "Esto no representa los valores que defiende nuestro equipo". Asimismo, asumió la responsabilidad última sobre la conducta en el programa de fútbol femenino, reafirmando su compromiso con la integridad y la deportividad. En este sentido, expresó: "Soy la responsable en última instancia de la conducta en nuestro programa. En consecuencia, para enfatizar el compromiso de nuestro equipo con la integridad, he decidido retirarme voluntariamente de dirigir el partido del jueves. En aras de la responsabilidad, lo hago pensando en los intereses de ambos equipos y para garantizar que todos sientan que se mantiene la deportividad de este partido". Estas palabras evidencian la madurez y el compromiso asumido por la entrenadora, en línea con los valores que promueve el deporte.

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