Buques de guerra de Rusia, Canadá y EE. UU. coinciden en Cuba

En una muestra de tensiones internacionales, la llegada de buques de guerra a La Habana, Cuba ha despertado preocupaciones y recuerdos de la Guerra Fría. El arribo de una patrullera de la armada canadiense, el submarino de ataque rápido de Estados Unidos y la flotilla de buques de guerra rusos a la isla ha generado un escenario de gran importancia geopolítica en el Mar Caribe.

La Armada Canadiense, en reconocimiento a la larga relación bilateral entre Canadá y Cuba, ha enviado la patrullera Margaret Brooke para realizar maniobras en el puerto de La Habana. Mientras tanto, Estados Unidos anunció la llegada del submarino de ataque rápido Helena a su base naval en la Bahía de Guantánamo. Estas llegadas se suman a la presencia de la fragata Almirante Gorshkov y el submarino de propulsión nuclear Kazán, ambos de origen ruso, que realizaron entrenamiento con misiles de alta precisión en aguas del océano Atlántico antes de arribar al puerto habanero.

Rusia, Estados Unidos y Cuba

Este evento ha recordado la tensión de la Guerra Fría, así como el complicado panorama de las relaciones entre Rusia, Estados Unidos y Cuba. A pesar de las preocupaciones, tanto Estados Unidos como Cuba han señalado que la presencia de buques de guerra rusos no representa una amenaza para la región, y Rusia ha calificado su llegada como una actividad rutinaria.

Rusia y Cuba mantuvieron una estrecha alianza bajo la antigua Unión Soviética, y la crisis de los misiles cubanos de 1962 fue un punto álgido en las tensiones de la Guerra Fría. La presencia de buques de guerra rusos en el puerto de La Habana ha suscitado cuestionamientos sobre el aparente nerviosismo de Occidente y ha traído a la memoria la tensión histórica entre estas naciones.

Se espera que la presencia de los buques de guerra rusos en el puerto de La Habana se extienda hasta el 17 de junio, manteniendo en vilo la atención internacional sobre el desarrollo de estos acontecimientos en el Mar Caribe.