Claudia Sheinbaum celebra candidatura de Kamala Harris a la Presidencia de EE.UU.

La futura presidenta de México, Claudia Sheinbaum, expresó su opinión sobre la posible postulación de Kamala Harris a la Presidencia de los Estados Unidos por el partido demócrata. Sheinbaum, quien asumirá su cargo el 1 de octubre, destacó la importancia de mantener la neutralidad a pesar de la satisfacción que representa ver a una mujer como candidata.

En una conferencia de prensa, Sheinbaum mencionó que, si bien es motivo de alegría ver a una mujer como candidata, su papel actual le exige respetar la decisión del pueblo estadounidense. Asimismo, resaltó la relevancia de la relación entre México y Estados Unidos, independientemente de quién resulte elegido como próximo presidente.

Enfasis a la relación México - Estados Unidos

La presidenta electa enfatizó la importancia de mantener una buena relación con cualquiera que sea el resultado de las elecciones en Estados Unidos. Hizo hincapié en la relación comercial y la presencia de una gran comunidad mexicana y de origen mexicano en territorio estadounidense, así como en las dinámicas de comunicación que existen en las ciudades fronterizas de ambos países.

Neutralidad frente a la libre determinación de los pueblos

Sheinbaum subrayó que, si bien fue una de las primeras personalidades internacionales en ser felicitada por Harris tras su victoria electoral, se mantiene convencida de que su papel actual exige mantener la neutralidad y respetar la libre determinación de los pueblos. Este posicionamiento cobra especial relevancia al considerar que asumirá la Presidencia de México un mes antes de las elecciones en Estados Unidos.

Por su parte, Kamala Harris ha dado inicio a su campaña para la Presidencia de Estados Unidos, logrando un destacado apoyo y estableciendo un récord en la recaudación de fondos. Tras el anuncio del presidente Joe Biden sobre su decisión de no presentarse a la reelección y de señalar a Harris como sucesora, la candidata demócrata ha cobrado un papel protagónico en la contienda electoral.

Ante este escenario, la postura de neutralidad de Claudia Sheinbaum, próxima presidenta de México, adquiere un peso significativo en el contexto de las relaciones internacionales y en la coyuntura política que define el futuro de la región.