
Francia expresa inquietud por posible influencia política de Elon Musk en futuro gobierno de Trump
Francia expresa preocupación por el impacto de Elon Musk en la democracia estadounidense y aboga por el fortalecimiento de Europa como potencia geopolítica.

Francia está expresando preocupación por el posible impacto político que pueda tener Elon Musk en la futura administración del presidente estadounidense, Donald Trump. Esto se debe a la transformación de la red social Twitter, ahora conocida como X, después de ser adquirida por Musk. El ministro francés de Exteriores, Jean-Noël Barrot, ha hecho declaraciones sobre el tema, enfatizando la vulnerabilidad de la democracia y la necesidad de regular el debate público en redes sociales.
Barrot instó a los europeos a asumir un papel activo en su futuro en lugar de ser meros espectadores de la historia. También resaltó la importancia de que Europa retome su posición como potencia geopolítica, apostando por su fortalecimiento en los ámbitos militar, industrial y comercial.
Dependencia militar y desafíos globales
El ministro francés destacó la alarmante dependencia de los equipamientos militares y municiones de los ejércitos europeos de otras regiones del mundo, considerándola “inaceptable”. Propuso un desarrollo masivo de la industria militar europea para reducir esta dependencia. En cuanto a la guerra en Ucrania, Barrot expresó la importancia de que cualquier acuerdo de paz cuente con la participación de los ucranianos y de los europeos, advirtiendo que actuar en sentido contrario tendría consecuencias graves.
Barrot también analizó la victoria de Trump en la elecciones estadounidenses, sugiriendo que es una respuesta a la falta de atención de las élites hacia los cambios en el mundo y la frustración de las clases medias y populares. En este contexto, abogó por devolver el poder y la responsabilidad a los ciudadanos como pilar fundamental de la democracia.
Riesgos de tensiones comerciales
Ante el posible desencadenamiento de una guerra de aranceles por parte de Trump, el ministro francés advirtió que penalizar a la UE, principal socio comercial de Estados Unidos, sería un “error histórico”. Argumentó que perjudicaría a las empresas estadounidenses establecidas en Europa y afectaría el poder adquisitivo de las clases medias estadounidenses. Además, reafirmó la determinación de Europa de defender sus intereses agrícolas, industriales, comerciales y tecnológicos, y respondió con barreras arancelarias a cualquier medida similar impuesta por Estados Unidos.
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