Joven de 22 años es ejecutado en Corea del Norte

Las ejecuciones públicas en Corea del Norte por escuchar y distribuir música y películas de K-pop han generado indignación a nivel mundial. Estos actos, considerados como "cáncer vicioso" por el régimen de Kim Jong-un, han sido denunciados en informes de derechos humanos.

En diciembre de 2021, un informe de Transitional Justice Working Group reveló que al menos siete personas habían sido ejecutadas por disfrutar del entretenimiento considerado ilegal en Pyongyang. Las ejecuciones, llevadas a cabo entre 2012 y 2014, incluyeron castigos públicos descritos como "muros húmedos" que apuntaban a desmoronar el país.

Influencia surcoreana y occidental

El régimen norcoreano ha prohibido no solo el K-pop, sino también varias costumbres que considere reaccionarias, como el uso de vestido blanco en las novias, beber alcohol en copas de vino, usar gafas de sol y otras influencias surcoreanas u occidentales. Incluso el uso de argot surcoreano está sujeto a inspección y castigo.

En 2022, el régimen impuso prohibiciones adicionales, tomando medidas en contra de la moda y los peinados "capitalistas", como vaqueros ajustados, camisetas con palabras extranjeras, pelo teñido o largo.

Enfoque en los jóvenes

El régimen se concentra especialmente en los jóvenes, quienes son inspeccionados con frecuencia para verificar el contenido en sus teléfonos móviles, controlando la ortografía de los nombres de contacto y las expresiones, así como el uso de influencias surcoreanas.

El informe, publicado el jueves 27 de junio, detalla la ejecución de un joven de 22 años en 2022 por escuchar 70 canciones surcoreanas, ver tres películas y compartirlas, en una clara muestra de la severidad de las prohibiciones impuestas por el régimen.

La comunidad internacional ha condenado estas acciones que atentan contra los derechos humanos y la libertad de expresión en Corea del Norte.