
El submarino autónomo Ran desaparece mientras estudiaba el glaciar Thwaites en la Antártida
El submarino no tripulado Ran, de la Universidad de Gotemburgo, se perdió mientras estudiaba el glaciar Thwaites en la Antártida.

El submarino no tripulado, conocido como Ran, se utilizó con éxito en la Antártida para revelar nuevos datos sobre el glaciar Thwaites, también llamado el "Juicio Final". Este vehículo submarino, propiedad de la Universidad de Gotemburgo, desapareció a finales de enero de 2024 mientras realizaba estudios en la mencionada región. Con siete metros de largo y equipado con una variedad de sensores, Ran analizaba la parte inferior del hielo y proporcionaba información crucial sobre el derretimiento del glaciar. Esto complementaba las observaciones obtenidas a través de datos satelitales.
Según la profesora Anna Wåhlin, Ran operaba de manera autónoma durante sus inmersiones bajo el hielo, que podían ser de entre 200 y 500 metros de espesor. El submarino seguía una ruta preprogramada y, gracias a su sistema de navegación, podía regresar a aguas abiertas de forma independiente. Durante sus misiones, Ran aumentaba progresivamente la dificultad, pasando de operar cerca del fondo del mar a acercarse al hielo para realizar mediciones más complejas en la capa que estaba en contacto con el agua.
La pérdida de Ran
Tras realizar varias inmersiones exitosas, Ran desapareció durante su última inmersión planificada en febrero de 2024. A pesar de los esfuerzos del grupo de investigación por encontrarlo utilizando diferentes métodos, incluyendo búsquedas acústicas, helicópteros y drones, el submarino no fue localizado. Aunque no se ha determinado con certeza su destino, la profesora Wåhlin considera probable que surgieron problemas que impidieron su salida del agua.
A pesar de la pérdida de Ran, la profesora Wåhlin destaca que el submarino proporcionó una gran cantidad de datos únicos y valiosos para las investigaciones internacionales, aportando un importante legado a pesar del riesgo que implicaba su uso en este tipo de estudios. Aunque su desaparición representó una gran pérdida, Ran permitió realizar una decena de expediciones, entrenamientos, trabajos de desarrollo y pruebas durante los cinco años en que estuvo en posesión de la universidad.
Ran tuvo un costo de casi 60 millones de pesos (38 millones de coronas suecas) y fue financiado por la Fundación Knut y Alice Wallenberg en 2015. Ante la pérdida del submarino, la profesora indica que el siguiente paso es buscar un nuevo patrocinador que cubra los costos de una nueva unidad para continuar con las investigaciones de la institución.
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