Trump intensifica detenciones de migrantes indocumentados en EE. UU., pese a denuncias de abusos

Trump intensificó detenciones de migrantes indocumentados en EE. UU., arrestando más de 5,500, alegando "delitos" aunque muchos no tenían antecedentes penales.

En los primeros días de la administración de Donald Trump como presidente de Estados Unidos, se evidenció un claro cambio en las políticas migratorias del país, reflejado en un aumento significativo en las detenciones de migrantes indocumentados. Estas acciones, llevadas a cabo por agentes del Servicio de Inmigración y Aduanas (ICE), se tradujeron en más de 5,500 arrestos en diversas ciudades del territorio estadounidense. Sin embargo, la implementación de estas medidas también generó controversias y denuncias de abusos hacia personas que no contaban con antecedentes penales.

Detenciones masivas en diferentes ciudades

En las dos primeras semanas de la administración Trump, los agentes de ICE llevaron a cabo una serie de operativos en más de una decena de ciudades, incluyendo importantes centros metropolitanos como Nueva York, Los Ángeles y Chicago. Esta estrategia marcó un claro cambio de enfoque en comparación con el gobierno anterior, ya que ICE comenzó a divulgar de manera pública el número diario de detenciones a nivel nacional, así como a destacar el perfil de algunos de los detenidos.

Según información proporcionada por la agencia en la red social X, se reportó un total de 5,537 personas migrantes arrestadas en operativos realizados en diferentes ciudades. Entre los detenidos, la agencia resaltó el perfil de 21 individuos, algunos de ellos identificados por nombre y foto, mientras que otros solo fueron mencionados por su nacionalidad y los delitos de los que se les acusaba, que abarcaban desde conducir bajo la influencia de sustancias hasta abuso sexual de menores. Cabe señalar que, salvo un caso de una persona de Afganistán, todos los individuos destacados por ICE eran de origen latinoamericano.

Colaboración y operaciones regionales

A pesar de la divulgación de cifras generales, las autoridades no proporcionaron detalles específicos sobre las detenciones, como desgloses por nacionalidad o la ubicación exacta de los arrestos. Cada oficina regional de ICE asumió la responsabilidad de compartir la información de manera selectiva, lo que limitó la transparencia sobre la magnitud de las operaciones en cada área. Por ejemplo, en Texas, se informaron 84 detenciones en el área metropolitana de Dallas, mientras que medios locales reportaron arrestos en varias ciudades, incluyendo San Antonio, Austin y Houston.

Operativos destacados en Chicago y Nueva York

Las operaciones en Chicago (Illinois) y Nueva York (Nueva York) captaron mayor atención mediática ya que altos funcionarios de la política migratoria, como el 'zar de la frontera' Tom Homan y la secretaria de Seguridad Nacional Kristi Noem, estuvieron presentes en los operativos. En Chicago, se reportaron al menos 100 detenciones, mientras que en Nueva York se informó de la captura de un supuesto miembro de la banda criminal venezolana Tren de Aragua. En total, las autoridades detuvieron a 39 personas en la Gran Manzana, según informaron medios locales.

Aumento de la capacidad de detención

Ante la intensificación de las detenciones, el gobierno de Trump anunció planes para aumentar la capacidad de los centros de detención para migrantes. Actualmente, ICE tiene la capacidad para detener a 41,000 personas, pero se contempla la posibilidad de utilizar bases militares para ampliar esta capacidad. El presidente Trump ordenó la construcción de un centro de detención en Guantánamo, con capacidad para 30,000 personas, y en Colorado se están preparando instalaciones temporales en una base de la fuerza aérea en Aurora, a las afueras de Denver, según informaron medios locales.

Percepción de los migrantes indocumentados

Desde el inicio de su campaña y durante sus primeros días en el cargo, el gobierno de Trump sostuvo que los arrestos se centrarían en las personas con antecedentes criminales violentos. Sin embargo, la administración cambió su enfoque y consideró a más de 11 millones de personas que residen en Estados Unidos como "criminales" por infringir las leyes migratorias. Datos filtrados a la cadena NBC News revelaron que solo el 52% de los 1,179 arrestados en un operativo de alto impacto fueron detenidos por haber sido condenados previamente por delitos.

Denuncias de abusos a los derechos de los migrantes

Las acciones de detención desataron una oleada de denuncias por abusos a los derechos de los migrantes. En varios estados del país, se reportaron casos de personas detenidas, incluso a pesar de ser ciudadanos estadounidenses o contar con un estatus legal. En Nueva Jersey, se informó sobre la detención de un puertorriqueño por agentes de ICE, a pesar de su ciudadanía. El alcalde condenó el hecho, destacando la falta de respeto a los derechos fundamentales. Asimismo, en Ohio, las autoridades detuvieron temporalmente a un hombre de origen mexicano que había trabajado en Estados Unidos durante 30 años con una visa U, la cual es concedida a víctimas de ciertos crímenes que colaboran con las autoridades.

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