Informe revela impacto de políticas de Trump en aumento de delincuentes no ciudadanos en EE.UU.

Durante el periodo presidencial de Donald Trump, más de 58,000 "no ciudadanos con antecedentes penales" fueron liberados, incluyendo cerca de 9,000 delincuentes violentos y más de 300 asesinos. Mientras tanto, la administración republicana centró sus recursos en detener a los migrantes solicitantes de asilo. Estos cuatro años no solo permitieron el ingreso de más delincuentes al país, sino que se dedicaron esfuerzos a llenar los centros de detención con solicitantes de asilo.

Por otro lado, el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) “liberó a más del doble de personas condenadas por delitos en comparación con cualquier año durante la presidencia de Biden”. Desde que Biden priorizó la expulsión de delincuentes, su administración ha reducido en un 54 % las liberaciones de delincuentes condenados.

En cuanto a los delitos cometidos por los no ciudadanos, el informe detalla que cerca de 11.000 individuos que ingresaron durante el Gobierno de Trump y fueron condenados por delitos no relacionados con la inmigración, incluyendo violación y asesinato, fueron arrestados nuevamente por el ICE. Asimismo, se afirmó que las políticas de Trump incentivaron el ingreso de delincuentes migrantes, generando un aumento de tres veces en el número de condenados que intentaban cruzar la frontera ilegalmente.

Las políticas de Trump y su impacto

El Instituto Cato recordó que Trump, en su cuarto día en la presidencia, firmó una orden ejecutiva que revocó las políticas del Gobierno Obama que priorizaban la detención y remoción de amenazas graves a la seguridad pública. En pocos meses, la administración Trump separó familias en secreto y redirigió recursos hacia el enjuiciamiento de padres migrantes y a aquellos que excedían el tiempo de su visa, en lugar de centrarse en los delincuentes graves.

Además, durante la gestión de Trump, se desestimó el enjuiciamiento de inmigrantes con antecedentes penales para dedicar recursos a separar familias. Estas políticas llevaron a un aumento significativo en los intentos de cruce ilegal por parte de personas con condenas penales, alcanzando cifras récord a fines de 2020.