Madre de Kim denuncia complicidad entre kínder de Mexicali y clínica tras abuso a su hija

La madre de Kim, una niña de 3 años que fue víctima de abuso sexual en un jardín de niños en Mexicali, Baja California, ha acusado a la clínica que la atendió de no reportar la agresión y de tener lazo con la institución educativa. La madre reveló esta situación en una entrevista para la cadena de noticias Fórmula, donde expuso el doloroso proceso que ha tenido que afrontar junto a su pequeña. La clínica, señala, solo le proporcionó naproxeno y paracetamol como tratamiento.

Denuncia de la madre de Kim en Mexicali

La madre de la menor, identificada como Dulce Corona, relató la experiencia de llevar a su hija a la clínica después del presunto abuso. La estrategia de cuidado y atención que se encuentra en la clínica fue suministrada como una extensión de los servicios del jardín de niños. Sin embargo, la respuesta de la clínica ante el dolor físico evidenciado por Kim fue, según la madre, totalmente inadecuada “Esta clínica, la primera a donde llevé a mi hija, ya tiene problemas porque llevan los seguros de escuelas. Un niño que se cayó porque sufría de bullying, lo mandaron para allá, le dieron naproxeno con paracetamol y a la hora de que regresó se murió por un derrame cerebral”, declaró la madre.

Dicha declaración evidenció la peripecia a la que Dulce y su hija tuvieron que someterse. La madre de Kim, quien tuvo que lidiar con la angustia de ver a su hija con dolor y conmoción, mostró profunda preocupación por la falta de un diagnóstico y tratamiento adecuado por parte del personal médico. “Me duele este hecho de que mis hijos no puedan ir a la escuela, que los estén señalando, que en el trabajo de mi esposa la estén señalando. Esto me duele y necesito respuesta ya”, enfatizó ante los medios de comunicación.

Además del testimonio de la madre, el abogado que representa legalmente a la familia, Cuauhtémoc Casillas, aseguró que la menor empezó a mostrar conductas de protección, las cuales despertaron la duda materna sobre un posible evento traumático. Kim evitaba entrar al baño, una acción que desató una serie de interrogantes en su madre. “No quiero entrar al baño porque mis maestros me hicieron algo”, sería la respuesta que Kim dio a su madre.

Caso de Kim genera reacciones de la población

Ante la controversia que ha suscitados este caso, la comunidad ha salido a manifestarse para exigir justicia. Miles de familias se unieron en la ciudad de Mexicali para demandar esclarecimiento y justicia por el abuso sufrido por Kim. Esta expresión de respaldo difunde el sentimiento generalizado de rechazar cualquier forma de violencia contra la infancia, exigiendo la garantía de espacios seguros para el desarrollo escolar de los niños.

Por su parte, el presunto agresor, identificado como Eliseo “N”, ha salido al paso de las acusaciones, manifestando su inocencia y asegurando contar con pruebas que demuestran que nunca ingresó al baño en compañía de la pequeña. Hasta el momento, no ha sido llamado a declarar, situación que ha ventilado ante la prensa, solicitando que se aclare lo más pronto posible para restituir su integridad y la de su familia.