Sinaloa registra el día más violento del año con 14 asesinatos, incluyendo ataque a centro de rehabilitación

En el marco del conflicto interno del Cartel de Sinaloa, el estado ha sido testigo de un aumento alarmante en la violencia, alcanzando un pico sin precedentes en lo que va del año. Las autoridades han reportado un total de 14 asesinatos, nueve de los cuales ocurrieron en un centro de rehabilitación en Culiacán, convirtiéndose en uno de los episodios más trágicos de la disputa entre facciones del crimen organizado.

El ataque en la clínica de rehabilitación en Sinaloa

El ataque a la Clínica Shaddai, ubicada en la Colonia Colinas de San Miguel, dejó una estela de dolor y horror. Un grupo armado irrumpió en la vivienda adaptada como centro de rehabilitación, destrozando los portones de acceso y abriendo fuego indiscriminadamente hacia el interior. El resultado fue devastador: nueve pacientes perdieron la vida y cinco más resultaron heridos, entre ellos una joven de apenas 21 años.

El contexto de violencia en Sinaloa

Este ataque se enmarca en una serie de actos de violencia que han sacudido a Sinaloa en los últimos meses. Según el Sistema Nacional de Seguridad Pública, los días más violentos antes de este incidente se registraron el 19 de enero con 12 homicidios dolosos, el 17 de febrero con 11 y el 27 de marzo también con 11. Sin embargo, el ataque a la Clínica Shaddai se erige como el más brutal desde que estalló la confrontación entre las facciones del Cartel de Sinaloa, conocidas como “Los Mayitos” y “Los Chapitos”.

La escalada de violencia en centros de rehabilitación

El ataque a la Clínica Shaddai no es un hecho aislado, sino parte de una serie de agresiones dirigidas a centros y clínicas de rehabilitación en el estado. Desde el 9 de septiembre hasta el 7 de abril, se han registrado al menos siete ataques a estas instalaciones, evidenciando la intensificación de la guerra entre las dos facciones del Cartel de Sinaloa. La Fiscalía estatal ha documentado también la intervención en al menos cuatro clínicas de rehabilitación en Mazatlán, así como el reclutamiento forzado de hasta 30 personas, lo que refleja la gravedad de la situación.

La violencia desatada por el conflicto interno del Cartel de Sinaloa ha dejado una profunda huella en la comunidad, generando preocupación e indignación tanto a nivel local como nacional. La escalada de ataques a centros de rehabilitación, en particular, ha conmovido a la sociedad y ha puesto de manifiesto la necesidad urgente de implementar medidas efectivas para salvaguardar la seguridad de la población y poner fin a esta espiral de violencia.